lunes, agosto 13, 2012

Desconcierto.

A veces, me siento como Sheldon Cooper cuando dijo con aire asombrado e interrogante: “No sé lo que indica el protocolo en estos casos: ¿me voy?, ¿me quedo?, ¿les ofrezco una bebida refrescante?”. En mi caso, a partir de un asombro instantáneo, se mezclan reflexiones de consideración a las personas y de principios, junto con sentimientos y esa interrogante predominante sobre qué debo hacer en esa situación.